Origenes: Al comenzar la colonizacion en América, los europeos trajeron esclavos de África cuya religion no se apegaba al cristianismo, estos no les permitian adorar a sus dioses por lo que estos se vieron forzados a buscar similitudes con los santos cristianos, de esta forma los esclavos pudieron seguir adorandolos sin que se dieran cuenta sus dueños.
La Iglesia trató de evangelizar a los negros pero las condiciones eran muy difíciles. Además de la escasez de sacerdotes, la injusticia de la esclavitud dificultaba que los esclavos comprendieran y aceptaran lo que se les enseñaba acerca de Dios. Las buenas almas que buscaban ayudarles y evangelizar eran de la misma raza que aquellos otros que les oprimían. El resultado fue que muchos yorubas aceptaron exteriormente las enseñanzas católicas mientras interiormente mantenían su antigua religión.
En sus esfuerzos de esconder su religión africana y sus prácticas mágicas, los lucumís identificaron sus deidades africanas (orishas) con los santos del catolicismo, dando como resultado un sincretismo religioso conocido por muchos como la Santería.
Apegados a sus costumbres el pueblo Yoruba, trajo consigo sus tradiciones, para de esa forma sobrevivir a ese cambio radical al que fue sometido. La Santería no es una religión “primitiva“. Al contrario los Yorubas eran un pueblo muy civilizado, con una rica cultura y un sentido muy profundo de la ética. Dicen creemos en un dios, conocido como Olorum u Olodumare. Olorum es la fuente del ashe, la energía espiritual de la que se compone el universo, todo lo vivo y todas las cosas materiales. Olorum interactúa con el mundo y la humanidad a través de emisarios. Estos emisarios, llamados Orishas, gobiernan cada una de las fuerzas de la naturaleza, y cada aspecto de la vida humana. Podemos acudir a ellos, pues es sabido que ellos acuden en ayuda de sus seguidores, guiándonos a una mejor vida material, así como también una mejor vida espiritual.
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